Argentina: Situación política del gobierno tras su derrota electoral el 28 de junio

Posted by LA CHISPA on 19:57


Comité Editorial de LA CHISPA


El gobierno de Cristina Fernández adelantó las elecciones parlamentarias, con la intención de evitar el desgaste político que iban a tener como resultado de los ajustes económicos que lanzarían sobre los trabajadores y sectores populares.

Pero no pudo evitar la derrota, a manos de una oposición fragmentada, timorata, sin proyectos, cargada solo de “cosmética”. Pero el “voto bronca” (con todo el atraso que implica) se impuso, aunque a la semana siguiente la fragmentación se mostrara sin pudor: Lilita contra Margarita, Felipe Solá en un bloque y su socio electoral De Narváez en otro; “progres” de ayer, enfrentados electoralmente, acercándose nuevamente al gobierno como Malacuse, Lozano y Bonasso.



Los jueces no han permanecido “neutrales” (nunca lo fueron!) y tras la derrota electoral del matrimonio Kirchner se han puesto diligentes y aceleradamente respaldaron los amparos por el tarifazo, y hasta Zafaroni, al igual que Fait hace unas semanas han comenzado a hacer declaraciones impensadas hace pocas semanas, por provenir de miembros de la suprema corte de justicia.


En pocas palabras: la crisis no solo sacude al gobierno Kirchner, sino que se extiende a los partidos políticos fragmentados, a la justicia, o sea a los pilares del régimen democrático burgués, que nunca pudo recuperarse después de la paliza del 2001 que culminó con la caída del gobierno de de la Rua.



El “diálogo” del gobierno tras la derrota electoral.


El gobierno y los partidos de la oposición tienen una coincidencia de fondo: la defensa del régimen político democrático burgués. Cristina Fernández debe durar en la presidencia si o si hasta terminar su mandato. Y el parlamento debe ser el único escenario valido para resolver entre ellos todo los problemas.


La dirigencia del sector agropecuario, el Comité de Enlace, hace meses se ha alineado con esta posición. Las grandes movilizaciones del campo en las rutas, que detonó importantes cacerolazos en los centros urbanos de gran parte del país, expresando el repudio a la política del gobierno de CFK de amplios sectores no ligados directamente al sector agropecuario, que protagonizó grandes actos-concentraciones que opacaron todos los esfuerzos del aparato estatal, que solo logró magros actos garantizados por el aparato del estado. Meses de movilizaciones que pese a la timorata dirección que los conducía, logró fisurar al partido gobernante, expresado en la votación parlamentaria que frenó el empecinado decreto 125.


A partir de entonces, la dirección agropecuaria, a pesar de muy variadas expresiones de descontento de las bases (los pequeños productores) se alineó con el resto de la oposición burguesa al gobierno: el lugar para dirimir el problema es el parlamento. Varios dirigentes de las diferentes organizaciones agropecuarias, para reforzar esta orientación, participaron como candidatos a legisladores de diferentes partidos de la oposición al gobierno. Y hace semanas recorren los medios televisivos defendiendo esta vergonzosa posición, que incluye a De Angelis y los dirigentes de la Federación Agraria, además del resto de la Mesa de Enlace.



Lamentablemente, la gran movilización motorizada por la clase media del interior, fundamentalmente agraria, fue traicionada por la dirección burguesa del sector: La mesa de enlace. Pero no debemos olvidar, que en el enfrentamiento campo-gobierno, el movimiento obrero no intervino. La burocracia sindical, con Moyano a la cabeza, se jugó por los Kirchner, y gran parte de la izquierda política del país fue incapaz de entender el proceso político que se abría con la movilización agropecuaria a quien catalogó de “oligarquía”, coincidiendo, en los hechos, con el gobierno de CFK.



El tarifazo y la marcha atrás del gobierno


El “modelo” del gobierno Kirchner ha consistido, esencialmente en traspasar gigantescas sumas de dinero del Estado a las grandes empresas, bajo el disfraz de “subsidios”. El modelo de la billetera que lo compraba todo. Sin inversiones, solo fuga de ganancias. Aun así el gobierno siguió privilegiando a las grandes empresas a la hora de consumir energía o agua. Se importó gas, electricidad, combustibles etc. Todo lo que las empresas necesitaban. Hace aproximadamente un año la crisis empezó a producir importante déficit a los fondos nacionales, primero se echó mano a las AFJP, luego la ANSES se transformó en la lámpara de Aladino para satisfacer las necesidades del gobierno de Cristina Fernández


Mientras se barrían los datos debajo de la alfombra y el INDEC de Moreno dibujaba índices irrisorios, los aumentos de transporte, combustible, peajes, etc., iba creciendo. Pero el gran golpe vino con los tarifazos a la luz y el gas. El gobierno los lanzó para poder “ahorrar los subsidios” que hasta entonces brindaba generosamente a las grandes empresas de energía. Pero las movilizaciones de usuarios (Mendoza, Rosario; Mar del Plata etc.) así como los amparos judiciales que se extendían en 9 provincias y grandes localidades como Avellaneda, Rosario, Mar del Plata, La Matanza, etc. Los temidos cacerolazos que flotaban en el aire, llevó al gobierno a dar marcha atrás con sus decretos. Una clara derrota del gobierno y un triunfo de la movilización.



Santa Cruz en rojo. Se tambalea el gobernador


La provincia natal de los Kirchner. El feudo gobernado durante 20 años por el clan que en el 2003 llego al gobierno nacional , provincia rica en regalías petroleras, pocos habitantes, donde docentes, municipales, personal de salud publica, judiciales, etc., percibía salarios mas que miserables durante los años de K- menemista, y donde los gobiernos provinciales no se animaban a tomar la menor decisión sin consultar con Néstor Kirchner no solo perdió las elecciones el 28 de junio, ahora la debacle económica de tanto desmanejo y negociados terminaron con la renuncia del ministro de economía provincial, y el retorno a las huelgas petroleras.


Igualmente crítica es la situación del gobierno en Tierra del Fuego, y en muchas provincias, como Córdoba, los gobernadores (con el cuento del “Diálogo”) van desfilando por el despacho presidencial en busca de dinero para salir de los atolladeros que afrontan.



El aliado importante que aun conserva el gobierno: Las direcciones sindicales traidoras

La “lealtad” que por ahora conservan los Kirchner (por la que vienen pagando un precio multimillonario)
Es la de Moyano y los viejos popes de la CGT. Ellos han sido el freno fundamental para que las protestas obreras no se expresen en forma centralizada. Los trabajadores los odian, pero han sido, hasta ahora, incapaces de liquidarlos. Pero los muchachos de la CGT no están solos: la CTA a aportado su propia legión de traidores, con Hugo Yasky a la cabeza que se ha negado sistemáticamente a unificar las luchas docentes y de los estatales.

La escoria de estos viejos dirigentes corruptos, muchos de ellos cómplices con la dictadura de Videla y cia. Le han garantizado al gobierno Kirchner la ausencia de Huelgas Generales, llegando a vociferar que en esta época la herramienta más importante es el voto!!!!



La debilidad del gobierno: un ocaso político de pronóstico incierto

La derrota política electoral, la crisis económica, la resistencia atomizada aun pero en aumento de los trabajadores y sectores populares( a pesar de de los bomberos sindicales aliados al gobierno)va transformando en arenas movedizas los sustentos del gobierno. Mientras aparentan no darse por enterados de la situación, juegan caprichosamente con la defensa de Moreno, y ahora hasta van a apelar al fútbol (circo sin pan) acercándose al mafioso Grondona.


El “diálogo” que trastorna las esperanzas de toda la fauna política de la oposición burguesa, así como la panacea parlamentaria solo conduce al pantano del que todos los sectores políticos burgueses ni quieren ni pueden salir.