PARA TAPAR LA CRISIS

Circo electoral

El gobierno dibuja la realidad en las cifras del INDEK, desmiente una y otra vez la existencia de la inflación, afirma que la epidemia de Dengue está controlada, machaca que su plan económico es un ejemplo para el mundo, que la crisis económica está bajo control, que Cristina es una estadista – catedrática en todos los temas… pero… dispusieron adelantar las elecciones que estaban previstas por ley en octubre porque no llegaban… y… las pasaron para el 28 de junio. La farsa parlamentaria les permite hacer lo que ellos disponen.

Así, tanto el gobierno KK como todos los partidos, alianzas, grupos y subgrupos del espectro político burgués del país, se lanzaron a la caza de posibles votantes. Todos los problemas reales que día a día producen más y más deterioro en la calidad de vida de la población trabajadora les importa tres pitos.

El gobierno, fundamentalmente a través del marido presidencial, vocifera todos los días el conocidísimo argumento “o nos votan a nosotros o el caos se apoderará del país”. En medio de la crisis mundial, los pilotos del “Frente para la victoria” vuelan sin radares. Alimentan día a día su desesperación con inventos y fantasías como los “Candidatos testimoniales”, (o sea todos los que pedirán su voto pero luego no asumirán los cargos, porque solo estaban en las listas para “testimoniar” que los KK son el único salvavidas del país)

La farándula electoral trata de embaucarnos con “famosos” igual que hizo Menem (¿Se acuerdan de Palito Ortega - chango tucumano - cantor; Scioli desconocido motonauta; el Lole famoso piloto de fórmula 1; etc.). Ahora, Nacha Guevara saltó del teatro (donde interpreta el papel de Evita) a la lista que el gran pingüino jefe encabezar en provincia de Buenos Aires, para darle un toque de glamour. ¡¡¡Que asco!!!


Nada de debate, solo chicanas.

Las ideas no cuentan. Las propuestas no existen. Cambalache generalizado. El gobierno tiene una sola propuesta a cualquier precio: ellos son la salvación y punto. La oposición recurre a los mismos métodos. Ni una palabra sobre que bases se unifican o separan. El patético ejemplo de Felipe Sola: Diez años ministro de Menem, luego vicegobernador de Ruckauf con la bendición de Duhalde, por último gobernador al servicio de Kirchner, después diputado y ahora aliado de Pro - Macri. El culebrón es muy largo y no queremos aburrir. (Nos queda en el tintero el “ni” Cobos; los radicales; la comparsa de Carrió; etc.)

Eso sí, todos los candidatos burgueses (oficialistas y opositores) coinciden en que la deuda externa hay que pagarla. Que los patrones manejen los negocios a su antojo, saqueen a su antojo, paguen salarios miserables a su antojo, que los pobres se las arreglen como puedan, no es asunto de ellos. En el reparto de la miseria han sido lo mismo. Ni agua, ni cloacas, ni caminos, ni escuelas, ni hospitales, ni transportes, ni red de gas. NINGUNO DE ELLOS SE INTERESA EN RESOLVER LOS PADECIMIENTOS POPULARES. ¡¡¡Por eso no tenemos que votar a ninguno de ellos!!!

La izquierda fragmentada y lejos de los trabajadores.

Lamentablemente, los partidos y organizaciones que se reclaman de izquierda han sido incapaces de organizar un Frente de los Trabajadores y la Izquierda. Y no nos referimos a “Proclamarse” sino a HACERLO, trabajando desde la clase obrera y los sectores populares y a su servicio. Llamando a debatir fraternal y democráticamente un programa común, que exprese la propuesta de soluciones obreras a la crisis que viven los trabajadores y el pueblo.

La izquierda fragmentada, con promesas electorales y candidatos nombrados por cada una de las organizaciones, lanzadas a capturar los votos populares para “sus” candidatos. ¡¡¡Triste papel!!!

La izquierda, sin el menor intento de poner su legalidad al servicio de que los candidatos sean los mejores luchadores, los que decidan los trabajadores, ha optado una vez más, participar de las elecciones solamente en busca de algunas bancas.

Desde La Chispa siempre hemos bregado por la organización de un Partido de Trabajadores. Que defienda los intereses de la clase obrera y de todos los sectores populares. Sin ninguna dependencia de los patrones. Los compañeros más viejos recordarán a Luís Zamora y su juramento cuando fue diputado por primera vez: “Juro defender a la clase trabajadora y a sus luchas para terminar con la explotación del hombre por el hombre y construir una sociedad socialista, fraternal y democrática en la Argentina y en todo el mundo”.


Compañeros, no nos prestemos al juego del circo electoral. Nadie nos consulto, ni tiene en cuenta nuestros intereses. No los votemos.