Argentina: Otro 24 de marzo sin Justicia

La Chispa, Argentina

Viernes 20 de marzo de 2009.

El 24 de marzo de 1976 las fuerzas armadas dieron el golpe de estado contra Isabel Perón. Tenían un objetivo bien claro, que Massera expresó descarnadamente: “vinimos para garantizar que por 50 años no volvamos a enfrentar el peligro del activismo sindical y político que nos amenazaba”. Masacraron sin asco.

“Desaparecieron” a 30.000 personas, el 50% de ellos fueron activistas sindicales que peleaban contra los traidores que ocupaban los sillones de los sindicatos. Algunos de los burócratas sindicales, como José Rodríguez, del sindicato mecánico automotor (SMATA), siguen el frente del mismo sindicato, a pesar de haber sido el entregador de los compañeros de la comisión interna de la fábrica FORD que fueron “desaparecidos”.

Estos burócratas sindicales traidores que, con Triaca (sindicalista del vidrio) a la cabeza, fragmentaron todas y cada una de las luchas de resistencia que venían dando los trabajadores, no pudieron evitar que, por presión de los de abajo, se llamara a una huelga general en medio del gobierno militar. Luego vinieron Malvinas y una nueva entrega del gobierno genocida.

Millones salieron a las calles contra el imperialismo ingles, luego contra el yanqui estrechando lazos con los pueblos latinoamericanos y por último contra la dictadura militar por traidores e ineptos. Ni la presencia del papa, que vino cuando las papas le quemaban al gobierno asesino, los pudo salvar de su estrepitosa derrota. Si la victoria del pueblo no fue total, fue porque, como hasta ahora, peronistas, radicales y sindicalistas se unieron en defensa de la continuidad capitalista, con el ropaje de democracia burguesa. Todo intento de meter a los asesinos en las cárceles quedó entonces congelado.

Décadas de impunidad en democracia

La mayoría de los organismos de defensa de los derechos humanos, lamentablemente, han dejado caer en el olvido las banderas de los que “desaparecieron”. Durante más de 30 años han clamado por justicia, pero solo un pequeño puñado de represores goza de confortables detenciones domiciliarias mientras se van muriendo de viejos en libertad.

Los jueces y las leyes del estado, que asesinó a 30.000 luchadores hace más de treinta años, no hacen “justicia” ni aun después de derogadas las “leyes” de Obediencia debida y Punto Final. Así todos los gobiernos de la “democracia”, respetando “los tiempos” de la “justicia”, han transformado en burla cruel todas sus propias declamaciones de “justicia”. Incluyendo a los presidentes Kirchner, bajo cuyo reinado desapareció JULIO LOPEZ.

Pero no solo no hay “justicia” para decenas de miles de desaparecidos por la dictadura de Videla, Massera y compañía. Tampoco hay justicia para las víctimas de la “democracia”. El “gatillo fácil” sigue su curso de impunidad, la misma impunidad con que los militares de la dictadura ultimaron a los compañeros que hoy recordamos.

Hace un año el oficial de policía Rodolfo Guidobono asesinó a un pibe de 14 años porque estaba escuchando música demasiado fuerte. Giuliano Gallo fue el inocente sacrificado en esa oportunidad. Su asesino goza de detención domiciliaria, y la fecha del juicio aun no se conoce. La “justicia” sigue “desaparecida”

La “democracia” en todos estos años ha tenido otros muertos, los que cayeron en los reclamos de la población contra el hambre como TERESA RODRIGUEZ, KOSTEKI Y SANTILLAN, CARLOS FUENTEALBA. Los asesinados por orden de De la Rua y sus cómplices en diciembre del 2001.

Pero el estado siguió matando también sin armas de fuego. Con la desocupación y la miseria para millones, mientras se siguió pagando la interminable deuda externa, (también en la era KK, que han sido los que mas dinero han pagado). Jóvenes sin escuela y sin trabajo son sus víctimas. El estado en vez de ocuparse de garantizarles un futuro digno los acusa de culpables, quiere verlos presos, los señala como el verdadero peligro de la seguridad. Una vez más colocan a sus víctimas en el sillón de los culpables.

Necesitamos nuevos dirigentes para impulsar la movilización obrera y popular

El castigo a todos los culpables del asesinato de miles de luchadores bajo la dictadura y bajo los gobiernos burgueses (democracia para los ricos) solo será posible si los trabajadores junto a los sectores populares, se movilizan masivamente hasta imponer JUSTICIA.

La resistencia masiva a la dictadura terminó volteándola. Ese es el camino. La movilización organizada, unitaria, de todos los agredidos por la falta de trabajo, los salarios miserables, las víctimas de la educación en ruinas, los que clamamos por justicia, contra la impunidad de los de arriba, podrá barrer a todas las lacras, sindicales y políticas, policiales y militares que pretenden perpetuar la impunidad otorgada desde TODOS los gobiernos, militares y “democráticos”, al servicio de los intereses de los grupos económicos actuales, que no son otros que los mismos que golpearon las puertas de los cuarteles en el '76.

TODOS A LA PLAZA DEL SOL EL MARTES 24 A LAS 17hs.

JUICIO Y CASTIGO A LOS ASESINOS DE AYER Y DE HOY!

Una sola chispa puede incendiar la pradera